MILAN/MOGADISCIO.- La dramática crisis del hambre en el este africano, que afecta principalmente al llamado Cuerno de África, obligó a la ONU a convocar a una nueva conferencia mundial para el jueves de la próxima semana, con el objetivo de recaudar fondos. Las autoridades de las Naciones Unidas reclamaron un aporte urgente de U$S 103 millones para recuperar la agricultura en una región donde 3,6 millones de personas afrontan el riesgo inminente de morir y otros 8 millones están afectados por la sequía y la falta de alimentos. La Organización para la Agricultura y la Alimentación (FAO) de la ONU explicó que recibió sólo U$S 57 millones de los U$S 161 millones pedidos a los 191 países miembro.

Los recursos se destinarán a la distribución de semillas e insumos; provisión de forraje para animales; entrega de vacunas y tratamiento para el ganado; acceso al agua y mejora en infraestructuras. "Cuando ves el número de cadáveres de animales junto a las rutas, eso significa que la población tiene menos capacidad para comprar comida hoy y mañana", remarcó la jefa de la División de Rehabilitación y Operaciones de Emergencia de la FAO, Cristina Amaral.

Toda tarea está dificultada por el despliegue de grupos armados radicales sin control, que impiden la llegada de alimentos, extorsionan económicamente a los organismos encargados o directamente asesinan a quienes se les enfrentan. Esto llevó al Gobierno de Somalia a ofrecer una amnistía a los extremistas islámicos de Al Shabaab (organización vinculada con Al Qaeda) si abandonan las armas y la violencia.

Los rebeldes ocuparon incluso Mogadiscio, la capital somalí, de la que se retiraron el sábado en medio de fuertes combates, aunque prometieron continuar con su lucha. Las principales zonas de la ciudad fueron acordonadas por fuerzas militares estatales, con apoyo de la Unión Africana. (DPA-AFP-Reuters)